Una Conferencia Internacional muestra las nuevas tecnologías al servicio de la lucha contra la diabetes

Una Conferencia Internacional sobre Tecnologías para la Diabetes, celebrada recientemente en París, ha puesto de manifiesto la creciente importancia de sensores y dispositivos conectados para mejorar la calidad de vida de los diabéticos.

Por el momento, la diabetes no tiene cura, por lo que los principales esfuerzos de la industria médica pasan por mejorar la calidad de vida de los que la padecen y evitar los efectos asociados a esta enfermedad, que van desde sobrepeso hasta la muerte.

En esta feria se han congregado médicos, científicos, start ups y firmas farmacéuticas, con el fin de mostrar lo último en análogos de insulina, nuevos sistemas de suministro, bombas de insulina, sensores de glucosa, dispositivos para la prevención diabética o páncreas artificiales.

Uno de los gadgets que más interés atrajo fue FreeStyle Libre, un medidor de glucosa desarrollado por Abbott que permite registrar los niveles de azúcar en sangre sin necesidad de pinchar el dedo, de forma rápida y discreta. El sistema emplea un pequeño sensor que se coloca sobre la piel del diabético, insertando una fina lámina de menos de cinco milímetros en el cuerpo.

Este dispositivo queda sujeto -incluso bajo el agua o al hacer deporte- y es preciso durante 14 días, tras lo cual debe ser reemplazado. Para leer los resultados, el paciente tan sólo debe acercar un lector NFC al sensor, incluso sobre la ropa. Así se recopilan todas las mediciones, tanto la actual como un historial de ocho horas. Los datos pueden enviarse después a un ordenador o a un smartphone para establecer tendencias y analizar más variables que permitan optimizar las dosis de insulina, la alimentación y los hábitos del paciente para evitar crisis de hipoglucemia e hiperglucemia.

Hasta ahora, equipos similares habían fracasado por su inexactitud frente al tradicional análisis de tiras. Sin embargo, Abbott ha aportado estudios que demuestran cómo la desviación relativa frente a los medidores tradicionales apenas supera el 11 %; así como que el 99,7 % de los resultados está comprendido en un margen de error óptimo, tanto en adultos como en mujeres embarazadas.

Gracias a la ayuda de FreeStyleLibre, los usuarios han logrado una reducción de hasta el 60 % en los picos de hipoglucemia. El siguiente paso ahora es eliminar el lector inalámbrico y hacer que una simple y cómoda 'app' móvil pueda reconocer las mediciones del sensor.

Abbott está en conversaciones con fabricantes de bombas de insulina para conectar este sistema de monitorización a otro que entrega la dosis ideal de insulina al paciente. De hecho, la otra compañía nombre propio en esta Conferencia Internacional ha sido Medtronic, una de las empresas de moda en esta convergencia de tecnología y salud, con las bombas de insulina como bandera de la compañía.

Esta semana se ha hecho público un acuerdo entre esta compañía y la multinacional Roche para desarrollar un medidor de glucemia basado en la conectividad Bluetooth Low Energy (BLE), que se comunicará con los futuros sistemas de bomba de insulina de Medtronic.

Junto a las grandes firmas, también se congregaron otras 'start-ups' especializadas en tratar con los efectos y los quehaceres que la diabetes impone a los que la sufren. Es el caso de Sugar Sleuth, una app que facilita la comprensión de las causas de variaciones en los niveles de glucosa para educar a los pacientes en los mejores hábitos de salud.

Otras como Diatrends Biotech apuestan por la interconexión de big data e inteligencia artificial para entrenar a los diabéticos, mientras que otras como la sueca Ilya Pharma se ha especializado en fármacos biológicos para acelerar la cicatrización de las heridas.

En el ámbito de la monitorización se mostraron propuestas originales como la de JupiterDevices, que usa una tecnología no invasiva de espectroscopia por microondas de alta resolución para detectar los niveles de glucosa. A su vez, la compañíua norteamericana Ther Nova ha conseguido desarrollar un páncreas artificial intraperitoneal.

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