Un fármaco contra la diabetes está haciendo furor entre las celebrities norteamericanas, hasta el punto de que incluso Elon Musk ha recurrido a él, con el objetivo de perder peso de una manera rápida.
Comercializado bajo la marca Ozempic, este fármaco muy conocido entre los pacientes con diabetes tiene como principio activo la semaglutida, aunque cuesta la friolera de casi 1.000 euros por dosis.
El caso es que este fármaco ayuda a reducir los niveles de azúcar en sangre, pero es también un fuerte inhibidor del apetito, y al ser un receptor GLP-1 hace que el páncreas libere insulina, la hormona responsable de regular el azúcar en la sangre, y ralentiza la salida de los alimentos del estómago, lo que disminuye el apetito.
Cuenta el diario La Razón que numerosos estudios han certificado que los receptores GLP-1 son herramientas de pérdida de peso altamente efectivas. Uno de ellos, realizado el año pasado, logró que los pacientes bajaran un 14 % su peso con semaglutida, frente al 2 % de los que usaron un placebo.
Se administra mediante una inyección en el estómago, el brazo o el muslo, y suprime de forma inmediata el apetito del paciente, lo que permite que el paciente pierda peso de una manera sencilla y rápida.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) norteamericana aprobó el fármaco sólo para el tratamiento de la diabetes tipo 2; y de hecho, el prospecto no indica nada sobre su uso para combatir el sobrepeso.
Este tratamiento para la diabetes cuesta alrededor de 1.026 euros, pero los seguros médicos no lo financian si se le da otro uso distinto. A pesar de ello, los dietistas más famosos del país han alertado de que cada vez más clientes solicitan el tratamiento de Ozempic, hasta el punto de que la demanda es tal, que está comenzando a haber escasez para lo pacientes con diabetes que realmente lo necesitan.
De hecho, la FDA ha incluido estel fármaco y el Wegovy, con efectos similares, en la lista de medicamentos en los que hay restricciones de suministro.
La demanda es tal que Ozempic ya es conocido como la droga de los famosos, tal y como lo definió Patti Stanger, productora ejecutiva del reality show “Millionaire Matchmaker”. Y no es una cosa puntual o local, hasta el punto de que Stanger ha dicho que “tengo amigos en Miami y en Nueva York que lo están utilizando”.
La popularidad del fármaco y el furor desatado en Hollywood el pasado verano se produjo después de que un vídeo de TikTok que hablaba de las propiedades para adelgazar del fármaco se viralizara. A partir de ahí, se dispararon los rumores de que personalidades tan influyentes como Kim Kardashian lo habían utilizado había usado después de que contara a sus seguidores que había logrado reducir la grasa corporal del 25 a 18 % en un corto período de tiempo.
La eficacia del tratamiento hizo que el nombre del fármaco comenzara a circular por los chats de mensajería instantánea y que todo el mundo quisiera probarlo; y a día de hoy, su uso se ha convertido en un imprescindible para las celebrities los días antes de hacer una comparecencia pública ya sea en una entrega de premios, fiesta o promoción de alguno de sus trabajos.
Así las cosas, el magnate tecnológico multimillonario Elon Musk admitió haber usado Wegovy para perder peso en su Twitter. Este último está destinado a la pérdida de peso, pero la firma danesa ha tenido problemas para mantenerlo en el suministro, lo que llevó a muchos a recurrir a Ozempic.
Jason Brett, director ejecutivo de asuntos médicos de la farmacéutica Novo Nordisk, advirtió que a pesar de sus similitudes, los medicamentos no deben usarse indistintamente. “Desde nuestro punto de vista, no promovemos, sugerimos ni alentamos ningún uso fuera de lo que indica el prospecto.... no buscamos la pérdida de peso con fines cosméticos o la pérdida de peso episódica para las personas que no se ajustan a los criterios de las indicaciones de la etiqueta aprobadas por la FDA”, ha explicado.
La realidad es que muchos de los 130 millones de estadounidenses con problemas de diabetes se están quedando sin poder acceder al tratamiento y se está generando cierto pánico porque la lista de espera de las farmacias están dando fechas para diciembre.
Este problema de desabastecimiento no solo afecta a EEUU, de forma que en España, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios también ha lanzado una alerta sobre problemas de suministro del fármaco.