Un estudio de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (Sefac), realizado con la colaboración de 72 farmacéuticos en 62 farmacias de todas las comunidades autónomas españolas y con la participación de 652 pacientes con diabetes, ha concluido que sólo el 34 % conoce adecuadamente su medicación, un porcentaje que se eleva en el caso de aquellos que cuentan con estudios secundarios (43 %) y universitarios (45 %).

Pese a estas carencias en lo que respecta al conocimiento de la medicación, el número de cumplidores asciende al 76 % del total. En total, el número de número de medicamentos antidiabéticos orales detectados fue de 833.

En este sentido, el estudio, titulado La diabetes en España desde la perspectiva de la farmacia comunitaria: conocimiento, cumplimiento y satisfacción con el tratamiento, indica que los principios activos más utilizados, solos o asociados, fueron metformina 472 (56,6 %), IDPP4 196 (23,5 %), sulfonilureas (SU) 87(10,4 %) y glinidas 74 (8,9 %).

Cuenta Diario Farma que Sefac ofrece datos del número de medicamentos utilizados para otras patologías por parte de estos pacientes. Como ejemplo, se refieren al tratamiento para la dilipemia, donde, de los 285 pacientes tratados (43,9 %), 253 (88,5 %) utilizan estatinas en mono o biterapia y 24 (8,4 %) fibratos como monoterapia. También destacan el uso de antihipertensivos: 177 de los 652 (27,2 %) utilizaban ARAII y 121 (18,6 %) IECA.

En lo que respecta a la satisfacción con el tratamiento, el porcentaje de pacientes respuestas positivas fue superior entre los hombres, 275 (85,9 %), que entre las mujeres, 261 (79,8 %), siendo el global de pacientes satisfechos 536 (82,8 %).

Vistos algunos de los principales resultados, Sefac indica que "una limitación del estudio, que afecta en general a la investigación en farmacia comunitaria, consiste en el acceso limitado a la historia clínica de los pacientes, lo que hace que las patologías y los tratamientos farmacológicos registrados sean los referidos por éstos, pues el acceso al diagnóstico es posible sólo cuando el paciente, por alguna circunstancia, aporta al farmacéutico un informe en el que aquél figura". Por eso, aseguran que "el acceso a diagnóstico, indicadores, objetivos, etc. por el farmacéutico comunitario, implicado activamente en el manejo del paciente diabético, redundaría de manera notable en beneficios para su salud".