Comer insectos ayuda a combatir la diabetes...

Los insectos, ya sean fritos, hervidos o incluso cubiertos de chocolate, son una importante fuente de nutrientes, ya que cuentan con un alto contenido de proteínas y aminoácidos, según un estudio liderado por Gabriela Jiménez Casas, del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

De acuerdo con la investigadora, los insectos, tales como los gusanos de maguey, chapulines, escamoles, hormigas rojas, grillos o las larvas de las moscas, engre otros, contienen entre un 50 % y 80 % de proteína, mientras que una porción de carne solo proporciona un 45 %.

Jiménez Casas ha subrayado que este alimento, poco habitual en ambientes occidentales, es muy benéfico para la salud, ya que no contiene grasas trans y no engorda.

Hace más de una década, a esta científica le diagnosticaron diabetes, tras lo cual comenzó a investigar si existe una dieta eficaz y balanceada sin azúcares. Tras estudiar numerosas posibilidades, llegó a la conclusión de que el consumo de insectos constituye una buena alternativa para una dieta balanceada tradicional.

Además, según ha explicado, cualquier insecto puede ser convertido en una especie de harina mucho más saludable que la de trigo. "La harina de trigo es sana, pero tiene muchos problemas para la gente por la intolerancia al gluten (…) Este tipo de problemas de salud no los tienen los insectos, puedes consumirlos, en cuestiones de carbohidratos no tienen y no tienen azúcares que es lo que afecta a los diabéticos, tampoco genera gluten", indicó.

La científica ha explicado que las aves que comen insectos suelen ser más sanas y tienen una carne más saludable, con menos grasa y más proteína.

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