La diabetes afecta en España al 10 % de la población, un dato solo superado en Europa por Turquía, cuya estadística asciende hasta un 14,5 % de afectados esta enfermedad crónica.

Este estudio estadístico elaborado por la International Diabetes Federation y publicad en diciembre de 2021, desveló una muy alta concentración de personas diabéticas en Turquía, que se sitúa en la primera línea del ranquin con una afectación de hasta el 14,5 %. En estos datos se cuentan todos los afectados, es decir, tanto nuevos casos, como los ya diagnosticados anteriormente.

España se sitúa en segundo lugar con una afectación también muy elevada que asciende hasta el 10,3 % de personas, siendo el tercer puesto de este renaking para Andorra, que en 2021 tenía un 9,7 % de personas afectadas por diabetes.

Los cuatro siguientes puestos con un 9,1 % de afectados los ocupan Albania, Serbia, Portugal y Montenegro, mientras que la octava posición la ocupa Chipre, que baja un 0,5 % respecto a los países anteriores. En noveno lugar, con un 8 % de los habitantes que padecen diabetes se encuentra Malta.

En el ecuador de esta gráfica se encuentra Bulgaria que, con un 7,4 %, comparte resultados con San Marino; mientras que la Santa Sede no se escapa de esta enfermedad que afecta al 7,3 % de los habitantes de esta ciudad estado.

República Checa cuenta con 7,1 % de afectados, seguida muy de cerca por Hungría, con un 7 % de prevalencia comparativa. Entrando en la cola de esta clasificación se encuentra Alemania que en 2021 tenía 6,9 % de su población afectada por diabetes; Polonia con un 6,8 % de pacientes de diabetes; Rumanía y Estonia con un 6,5 % de personas diabéticas: cerrando la lista Italia y Grecia, con un total del 6,4 % de afectados por este trastorno.

Según los datos proporcionados por la International Diabetes Federation en 2021 había 537 millones de habitantes en el mundo con diabetes, al tiempo que esta organización prevé que en 2045 la cifra ascienda hasta 783 millones, lo que supondría un incremento de hasta el 46 % en 24 años.

Europa sería en esa aún lejana fecha el continente menos afectado, y tan solo incrementaría un 13 %, mientras que los territorios con menos recursos como África o los países del norte de África y de Oriente Medio, serían los más afectados con un incremento del 134 % y del 87 % respectivamente.

En el sudeste de Asia se espera que la cifra pueda incrementarse en un 68 %; mientras que en América central y América del sur se incrementarían sus casos en un 50 %; y los países del oeste pacífico incrementarían un 27 % en 2045, y en Estados Unidos podría ver incrementada la afectación hasta un 24 %.