Con el objetivo de eliminar los exámenes de sangre constante entre las personas que sufren diabetes, se está avanzando en alternativas que, además de eficaces, son baratas. En este sentido, acaba de presentarse un novedoso parche que analiza el sudor del paciente, llegando a ofrecer informes bastante exactos sobre la cantidad de componentes químicos en él, aunque sus posibilidades pueden ampliarse bastante con el tiempo.
Se trata de un nuevo parche cutáneo microfluídico capaz de recolectar y analizar el sudor, ya probado para que pueda usarse en la próxima generación de dispositivos portátiles.
El sensor flexible recoge el sudor en un minúsculo sistema de tubos, y la superficie del mismo va cambiando de color a medida que reacciona a diferentes niveles de ciertos productos químicos encontrados en el sudor.
La idea es que los móviles puedan hacer una foto del sensor para obtener los informes correspondientes, ya que solo tendría que interpretar los colores en cuestión.
Los investigadores han conseguido equilibrar la suavidad, la delgadez, la flexibilidad y la comodidad, y garantizan que podría usarse incluso mientras se practica ejercicio de gran intensidad.
El sensor puede mantener el sudor capturado durante aproximadamente 125 horas después de haber sido obtenido de la piel, siempre y cuando todas las aberturas del canal del sensor estén selladas. Aún así, con los canales abiertos, podría estar durante 75 horas después de haberse eliminado de la piel.
Los responsables de este producto ya están trabajando en una versión comercial barata y desechable, con el objetivo de llegar a 1 o 2 euros por parche.
También siguen estudiando formas de medir el azúcar en la sangre a partir del sudor con una exactitud semejante a la de los exámenes tradicionales, para lo que deben aumentar el rango de sensibilidad de la detección de glucosa y entrar una mejor correlación entre la glucosa en el sudor y en la sangre.