En tiempos de confinamiento por el coronavirus, muchas personas con diabetes necesitadas de insulina para llevar un adecuado tratamiento de su enfermedad, no ven la manera de acceder a este compuesto, sobre todo en lugares aislados donde las farmacias y los centros sanitarios escasean. Para salir al rescate de esta gente, las miradas se han vuelto hacia un reciente caso, desarrollado con éxito, y basado en la entrega de insulina a un paciente diabético utilizando un dron.

Los investigadores defienden que los drones podrían convertirse en un futuro en la herramienta perfecta para hacer entregas urgentes dirigidas ubicaciones remotas, pero también ante situaciones de emergencia, catástrofes naturales, o confinamientos masivos como el que todos sufrimos estos días. Se trata de una tecnología que si hubiera estado más desarrollada en este momento, se podría estar utilizando masivamente para evitar que las personas con diabetes salieran de casa a por su insulina, al menos las que viven en lugares más inaccesibles.

Este vuelo de prueba duró 16 minutos y tuvo lugar hace algunos meses en Galway, Irlanda, desde donde trasportaron insulina hasta las Islas Aran, a unas 12 millas de la costa oeste de Irlanda.

En los últimos años las fuertes tormentas en la zona han interrumpido el acceso a la atención médica en el país, por lo que un equipo internacional de investigadores buscaba encontrar una manera de ayudar a las personas con diabetes en regiones remotas que podrían quedar varadas durante días después de un desastre sin acceso a medicamentos.

Según el investigador Derek O’Keeffe, endocrinólogo consultor en la Universidad Nacional de Irlanda, “ahora tenemos la tecnología y los protocolos de drones para administrar medicamentos y suministros para la diabetes en un desastre real si es necesario”, y añadió que “se trata de un hito en la mejora de la atención al paciente”.

El vuelo de prueba fue todo un éxito, y aportó además otro importante hito, ya que el dron regresó con una muestra de sangre recolectada del paciente para monitorizar el control del azúcar en sangre.

Se trata de una experiencia que es necesario poner en valor justo en un momento en el que numerosas de personas se encuentran aisladas a parte de confinadas, y abre la posibilidad de suministrar este producto en un futuro a través de un dron a cualquier diabético aislado del mundo que realmente lo necesite.