Un grupo de investigación en Fisiología del Ejercicio, Nutrición y Salud de la Universidad de Cádiz está llevando a cabo un programa de intervención de ejercicio físico y dieta para mejorar la salud de personas con diabetes, para el que necesitan voluntarias, y sobre las que realizar una valoración clínica del funcionamiento muscular, con medición de la microbiota intestinal de cada participante.
Este proyecto de investigación, coordinado por los profesores Cristina Casals y Jesús Ponce del departamento de Didáctica de la Educación Física, Plástica y Musical, parte del hecho de que la mayoría de personas que desarrollan diabetes tipo 2 han intentado previamente cambios en el estilo de vida y fracasaron porque no sabían cómo hacerlo, o bien lo consiguieron, pero con resultados inconsistentes, y con el temido “efecto rebote”.
Por este motivo, un equipo multidisciplinar que incluye endocrinos, nutricionistas, entrenadores personales titulados, enfermeras y médicos rehabilitadores, entre otros, está llevando a cabo una atención y seguimiento de forma individualizada y gratuita a pacientes con diabetes tipo 2 durante tres meses, aplicando todos sus conocimientos científicos para conseguir una mejora de la salud y una pérdida estable de la grasa corporal.
En este estudio pueden participar tanto hombres como mujeres con diabetes tipo 2, sin embargo, y hasta la fecha, el mayor número de voluntarios son hombres. Por tanto, desde este equipo de la Universidad de Cádiz, animan a todas las mujeres que puedan estar interesadas a que contacten con ellos para participar en el trabajo.
El metabolismo de la mujer y los cambios endocrinos en la etapa adulta son muy diferentes al de los hombres, y esto debe ser incluido en los estudios de investigación; de los que luego derivarán un diagnóstico y tratamiento de la enfermedad en el sistema sanitario adecuados y específicos para las voluntarias. Así las cosas, en concreto se les realizará una valoración clínica con un análisis de sangre completo, se les examinará el funcionamiento muscular debido a su papel clave en la captación de glucosa, y se les medirá la microbiota intestinal, ya que también tiene un rol importante en la utilización de la glucosa y en la consecución de la pérdida de peso o de grasa corporal.
Según han explicado fuentes del grupo de investigadores, “hay algunas características de las mujeres que dificultan la pérdida de grasa, pese a realizar ejercicio físico y dieta, y es por ello que nuestro grupo está especializado en el abordaje de la mujer pre, peri o post menopáusica. No obstante, para poder avanzar en la ciencia y mejorar la salud de las mujeres, necesitamos voluntarias que puedan compatibilizar la participación en el estudio y sus tareas diarias y por ello, tenemos diferentes tipos de intervenciones ajustadas a distintos horarios y días”.
Para poder formar parte de este estudio como voluntaria o voluntario se necesita tener menos de 65 años, padecer diabetes o pre-diabetes, o bien sobrepeso, y que la persona esté dispuesta a desplazarse para las pruebas a Puerto Real (Cádiz). Asimismo, es necesario que las voluntarias no hayan tomado antibióticos orales en los últimos tres meses y que tengan una medicación estable en los últimos seis meses sin cambios grandes de peso.
En relación a la medicación, “pueden entrar participantes que no tengan ninguna medicación o bien que se mediquen con pastillas (como Metformina o similar) o inyectables (como Ozempic o similar), aunque en esta fase no podemos incluir a personas que tomen insulina”.
Este grupo de investigación cuenta con numerosos casos de éxito con participantes que han conseguido mejorar el control de la diabetes e incluso reducir o eliminar la medicación en proceso similares.