El investigador mexicano Germán Alberto Chamorro Cevallos ha confirmado que el alga spirulina, que se consumía desde tiempos de los aztecas, permite controlar la diabetes, el colesterol y otros padecimientos. El Instituto Politécnico Nacional (IPN) ha precisado que los estudios de Chamorro con animales de laboratorio y con seres humanos han confirmado los efectos positivos de esta alga.
Chamorro señaló que utilizada como suplemento alimenticio, la spirulina podría contribuir en el manejo de problemas crónicos de salud, como diabetes, hiperlipidemia (exceso de grasa en la sangre) y enfermedades virales y del sistema inmune, entre otros.
El especialista, licenciado Químico Farmacéutico Industrial en el IPN y doctorado en la Universidad de Montpellier, Francia, recordó que el alga se consumía en México desde la época azteca, y se obtenía en el Lago de Texcoco. Lamentablemente, añadió, se dejó de consumir en el país a partir de la conquista española.
El científico expuso que la spirulina es un organismo unicelular que se agrupa formando filamentos y tiene entre 65 y 70 % de proteínas, vitaminas (especialmente A y B12), minerales, fenoles, ácido gama-linoleico y algunos antioxidantes.
Chamorro destacó que en México se pueden desarrollar más investigaciones para desarrollar este suplemento aunque falta su promoción para impulsar su cultivo a gran escala. Añadió que también son necesarios "experimentos" para aclarar los mecanismos por los que esta alga verde azul presenta sus propiedades farmacológicas, y dar lugar al aprovechamiento de otros productos de origen natural". El investigador aclaró que "mientras en México no se le ha dado la importancia necesaria al cultivo y empleo de la spirulina, en países europeos, asiáticos y africanos, así como en Chile, Brasil, Ecuador, Argentina y Uruguay, la cultivan y aprovechan sus beneficios".