Un fármaco para la diabetes podría ayudar a reducir el peso de personas jóvenes con obesidad severa y a controlar su riesgo cardiovascular, tal y como ha evidenciado una investigación realizada por la Escuela Médica de la Universidad de Minnesota (Estados Unidos).
Este trabajo, que ha sido publicado en la edición on-line de la revista Pediatrics, demuestra que Exenatida "puede ser útil" para este tipo de pacientes, según asegura el autor principal de este estudio y miembro de este centro universitario del Estado de Minneapolis, el doctor Aaron Kelly.
El galeno se ha mostrado "animado" tras analizar los resultados de los ensayos. Este compuesto está indicado "para impulsar la producción de la hormona insulina en adultos con diabetes tipo 2", explican los expertos.
En concreto, ayuda a las personas que padecen diabetes y que, por tanto, "no producen suficiente cantidad de la hormona, o que su cuerpo es resistente a ella", indican. Éste debe inyectarse en el vientre dos veces diarias, algo que supone un coste "de alrededor de 1.477 euros", señalan.
No obstante, los investigadores le han encontrado un nuevo uso, ya que han constatado que "reduce el peso del cuerpo al disminuir la rapidez con que se mueven los alimentos a través del mismo, lo que da a la persona la sensación de estar lleno por más tiempo".
Actualmente existen "pocos" tratamientos para los niños con obesidad grave más allá de las recomendaciones de cambios en el estilo de vida o de la cirugía, manifiestan. Por ello, el estudio dio un paso más allá y examinó si la pérdida de peso observada en adultos también se produciría en los menores.
De esta forma, los expertos dividieron en dos grupos de 12 y 10 menores a pacientes obesos de entre 12 y 19 años, siendo el primero de ellos tratado con exenatida dos veces al día durante tres meses, compuesto desarrollado como Byetta por la farmacéutica Amylin Pharmaceuticals.
Al otro grupo se le administró placebo. Al inicio del tratamiento, ambos grupos presentaron un índice de masa corporal medio de 43, cuando más de 35 representa obesidad severa. Sin embargo, finalizado el estudio, el primer grupo descendió hasta 41, mientras que el segundo se quedó en 42, lo que supone que los 12 menores bajo terapia de exenatida perdieran siete kilos más.
Tras ello, los 22 niños fueron tratados con este fármaco durante otro periodo de tres meses, lo que provocó que la diferencia se instalara en un cuatro por ciento. Por todo ello, los resultados de este medicamento en niños debe calificarse como "modestos", afirman los investigadores al tiempo que destacan que si se sostienen en el tiempo puede ser "genial".
De cualquier forma, Exenatida, que tiene como efectos secundarios más comunes al dolor de cabeza, la diarrea y los vómitos, "no está aprobado para usarlo en niños para bajar su peso", concluye Kelly.