Las celebraciones navideñas están marcadas por encuentros familiares y mesas repletas de comida, algo que puede suponer un serio desafío para quienes viven con diabetes. Así las cosas, mantener el equilibrio entre disfrutar de las fiestas y controlar la glucos, resulta clave para evitar complicaciones.
En este sentido, el Dr. Manel Díez Lomelí, ginecólogo de la Clínica Bmum de Madrid, ha compartido algunas recomendaciones para afrontar estas fechas sin renunciar al placer de los buenos alimentos, especialmente en casos de diabetes gestacional, donde el cuidado debe ser aún más riguroso.
Según el especialista, los dulces tradicionales como turrones, mazapanes y polvorones tienen un alto contenido de azúcar, por lo que es preferible evitarlos o consumirlos en cantidades muy pequeñas. Para quienes prefieren no renunciar del todo, las versiones sin azúcar o los postres caseros con edulcorantes naturales pueden ser una alternativa válida.
Asimismo, las bebidas alcohólicas están completamente contraindicadas en el caso de las mujeres embarazadas, ya que no existe una dosis segura durante el embarazo. En su lugar, se puede optar por infusiones, aguas saborizadas sin azúcar o bebidas sin alcohol adaptadas.
Pero mantener un equilibrio no significa privarse del todo, ya que es posible diseñar un menú navideño delicioso y apto para quienes tienen diabetes. Por ejemplo, una cena equilibrada podría incluir una ensalada de hojas verdes con frutos secos y queso fresco como entrante; un plato principal a base de pavo al horno o pescado acompañado de vegetales asados; y como postre, una macedonia de frutas frescas o un yogur natural espolvoreado con canela.
En esta linea, el Dr. Díez Lomelí destaca la importancia de controlar las porciones, ya que incluso los alimentos saludables pueden afectar la glucosa si se consumen en exceso.
Por otra parte, para quienes padecen diabetes, la actividad física es un aliado importante; de modo que dar un paseo después de las comidas, ayudará a estabilizar los niveles de glucosa y favorecer la digestión. Además, es fundamental mantenerse hidratado y asegurar un buen descanso, ya que estas rutinas contribuyen al bienestar general.
La planificación también juega un papel clave en las celebraciones navideñas; y saber con antelación qué se va a comer y qué actividades se realizarán, ayudará sin duda a evitar decisiones impulsivas.
Además, si se acude a una comida o cena navideña de empresa donde no hay opciones adecuadas, no debería haber problema en llevar un plato propio que sea compatible con las necesidades dietéticas.
El objetivo, subraya el especialista, no es vivir estas fechas con restricciones severas, sino encontrar un equilibrio que permita disfrutar con seguridad, de manera que si se da al cuerpo algún pequeño capricho, siempre puede compensarse controlando las demás comidas del día.
Finalmente, es importante recordar que estas celebraciones son un momento para compartir con seres queridos, y que con algunos ajustes y una actitud consciente, es posible vivir la Navidad plenamente, cuidando tanto la salud como los momentos especiales. “Lo más importante”, concluye el Dr. Díez Lomelí, “es priorizar el bienestar y disfrutar de esta etapa tan especial con calma y sin agobios innecesarios”.
