La semaglutida, comercializada como Ozempic, es uno de los medicamentos más populares contra la diabetes tipo 2, y además, para adelgazar. Ahora, un estudio publicado en la revista JAMA da cuenta de que este fármaco podría también prevenir el desarrollo de cierto tipo de cáncer asociado a la obesidad.
Más en concreto, reste medicamento reduciría el riesgo de 10 de los 13 tipos de tumores vinculados con la obesidad en pacientes tratados para controlar la diabetes tipo 2.
Según el estudio, la obesidad abdominal y la diabetes tipo 2 tienen una relación estrecha, y es que el exceso de peso favorece la deficiencia relativa de la secreción de insulina por parte del páncreas, lo que conlleva al aumento de los niveles de la glucosa en sangre, dando lugar a la prediabetes y diabetes.
En este sentido, lo que el estudio sugiere, es que el uso de Ozempic no solo ayudaría a controlar la diabetes y a perder peso, sino que también abre la esperanza a reducir el riesgo de cáncer.
Este reciente estudio ha demostrado que la semaglutida, comercializada como Ozempic, es una variable que reduce el riesgo de cáncer vinculado con la obesidad. Se trata de un fármaco inyectable de venta con receta utilizado en compañía de una dieta y ejercicio para controlar los niveles de la glucosa en la sangre en adultos con diabetes tipo 2.
La investigación, desarrollada entre 2005 y 2018 por la Facultad de Medicina de la Universidad Case Western Reserve de Cleveland (EE.UU.) y dirigida por Rong Xu, comparó a pacientes con diabetes tipo 2, de los que una parte ingirió un tipo de medicamentos agonistas de GLP-1, como el Ozempic, mientras que el resto tomó insulina.
El equipo de investigadores descubrió que aquellos pacientes que ingirieron agonistas de GLP-1, lograron reducir eficazmente una gran probabilidad de contraer 10 tipos de cáncer relacionados con la obesidad, de manera que este medicamento ayudaría a reducir el riesgo de padecer cáncer de ovario, riñón, colorrectal, páncreas, hígado y esófago.
Así las cosas, el autor de la investigación sugiere que “nuestro estudio aporta evidencia de que los agonistas de GLP-1 son prometedores para romper el vínculo entre la obesidad y el cáncer”.
Por esta razón, Rong Xu considera que sería bueno que se empiecen a implementar los agonistas de GLP-1 a más pacientes con diabetes, en la medida que sea posible.
Ozempic es un medicamento usado para perder peso, a partir de que se comprobó que los adultos con diabetes tipo 2 que lo tomaran podrían perder alrededor de 6 kilos. Además, este fármaco tiene efectos protectores contra eventos cardiovasculares graves, como ataque cardíaco, ataque cerebral e incluso la muerte de personas con diabetes tipo 2 y enfermedades cardíacas confirmadas.
En especial, la semaglutida reduciría el riesgo de infartos e ictus hasta en un 20 % en personas con sobrepeso, según afirman desde la compañía farmacéutica Novo Nordisk.
