Con el objetivo de concienciar sobre la realidad de las familias con hijos que padecen diabetes tipo 1, Medtronic ha presentado la campaña #BlueBalloonChallenge, que este año se inspira en la historia de Irina Zvereva, madre del medallista olímpico y estrella del tenis Alexander Zverev, diagnosticado de diabetes tipo 1 a los cuatro años.
Durante todo el mes, esta campaña animará a la población a publicar fotos o vídeos manteniendo un globo azul en el aire mientras realizan tareas cotidianas, simbolizando el esfuerzo continuo que requiere vivir con diabetes.
La iniciativa busca poner en valor el papel de las familias y cuidadores, cuyo apoyo emocional y práctico es esencial para que niños y jóvenes puedan disfrutar de una infancia plena.
La historia de Irina Zvereva ocupa un lugar destacado este año, y resalta la resiliencia de las familias y cómo su acompañamiento permitió a Alexander perseguir sus metas deportivas pese al diagnóstico.
Su testimonio pretende inspirar a otras familiar a afrontar los desafíos de la enfermedad sin renunciar a su proyectos.
La campaña cuenta tambiéncon la participación de familias y pacientes españoles, como Alejandra Cámara, madre de Casilda, diagnosticada con apenas un año y medio, y Yolanda Hellín, deportista profesional que gestiona su diabetes tipo 1 durante su primer embarazo. "Vivir con diabetes es como hacer malabares con un globo que siempre está en movimiento", ha señalado Yolanda en relacion con esta campaña.
Por su parte, Alejandra recuerda el impacto inicial del diagnóstico, al admitir que "fue abrumador: planificación de comidas, dejar de trabajar, controles constantes y noches sin dormir. Pero con el tiempo aprendimos a afrontar estos retos juntos. Ver lo que ha logrado Alexander Zverev es un ejemplo esperanzador".
Ambas han destacado la importancia del apoyo familiar ante los periodos sin supervisión médica directa, cuando recae en los cuidadores la responsabilidad de gestionar controles, hipoglucemias y situaciones inesperadas.
La campaña subraya que, en el día día, son las familias quienes sostienen gran parte de la carga de la enfermedad; y desde los controles nocturnos hasta el aprendizaje de tecnologías de tratamiento, su acompañamientos permite que los niños con diabetes tengan una vida lo más normal posible.
Según recuerda Alejandro Cámara, "no estábamos preparados para la rutina intensa, pero gracias a la comunidad y a historias inspiradoras como la de los Zverev, afrontamos cada día con más confianza".

